Remedio casero con miel y cebolla para calmar la tos

La tos es uno de los mecanismos de defensa ante la presencia de sustancias extrañas o agentes patógenos que interfieren con la salud respiratoria. Se caracteriza por un vaciado explosivo de aire desde los pulmones que puede venir acompañado con irritación de las vías respiratorias y flemas.

No es una enfermedad en sí misma, pero se origina como síntoma de afecciones del sistema respiratorio, incluyendo el resfriado y la bronquitis. También es un mecanismo de defensa que ayuda a limpiar nuestras vías aéreas de moco y materiales extraños, ya sea un microbio o un objeto atascado.

La tos, aunque es útil para el cuerpo es molesta. Por eso, muchos prefieren aplicar también un tratamiento para reducir la severidad de la tos. Además de los jarabes y remedios farmacológicos, existen recetas 100% naturales como alternativa para calmarla.

Por ejemplo, un preparado medicinal de miel y cebolla que, además de favorecer la expectoración, también fortalece el sistema inmunitario.

Preparado medicinal de miel y cebolla para calmar la tos

La mezcla medicinal de miel y cebolla es un antiguo tratamiento para limpiar las vías respiratorias. Por su efecto antitusivo, sirve como complemento para disminuir los episodios de tos crónica y congestión.

Sus compuestos mucolíticos y expectorantes ayudan a remover el exceso de flemas que obstruye las vías respiratorias. Además, humectan la garganta y reducen la irritación de los bronquios.

Beneficios de la miel

Por su efecto antibiótico y antiviral, la miel de abejas es uno de los ingredientes naturales que se emplean como solución alternativa contra las infecciones respiratorias.

  • Contiene enzimas naturales, compuestos antiinflamatorios y también potentes antioxidantes. Al ser asimilados en el organismo, favorecen la expulsión de las partículas dañinas que irritan las vías respiratorias.
  • Su alto contenido de vitaminas, minerales y aminoácidos mejora la función inmunitaria y también aumenta la respuesta de los anticuerpos contra las bacterias y los virus.
  • Tiene un ligero efecto expectorante que contribuye a expulsar las secreciones mucosas.
  • Su poder hidratante suaviza la garganta y calma la irritación derivada de las crisis de tos.

Beneficios de la cebolla

La cebolla es un ingrediente tradicional en el tratamiento de las enfermedades respiratorias. Su alto contenido de nutrientes esenciales fortalece las defensas y también yuda a detener el ataque de los agecntes infecciosos.

  • Contiene compuestos antioxidantes, vitaminas y minerales que protegen los conductos respiratorios contra los efectos nocivos de los radicales libres.
  • Tiene una poderosa acción expectorante que, a través de la tos, favorece la expulsión de los virus y bacterias que se acumulan en el sistema.
  • Ayuda a disminuir la congestión nasal, el dolor de garganta y otros síntomas que, a menudo, se manifiestan con la tos.
  • No produce reacciones secundarias indeseadas. Por el contrario, impulsa la eliminación de toxinas que interfieren en la salud inmunitaria y pulmonar.

Cómo hacer el preparado medicinal de miel y cebolla

Este preparado medicinal es apto para adultos y también para niños. No contiene químicos añadidos y además, sus ingredientes son suaves con el sistema digestivo.

Está indicado para controlar los episodios de tos, aunque también se aconseja como remedio para reforzar las defensas y prevenir infecciones.

Ingredientes

  • 2 cebollas
  • 1 taza de miel de abejas orgánica (335 g)

Utensilios

  • Cuchillo y tabla para picar
  • Frasco con tapa

Preparación

  1. Primero pela las cebollas y luego córtalas con el cuchillo en varios trozos o láminas.
  2. A continuación, añade los trozos en un frasco de cristal y cúbrelos con la miel de abejas.
  3. Tapa el preparado y déjalo reposar en un lugar fresco y oscuro, durante 8 o 10 días.
  4. Pasado este tiempo, cuélalo y envásalo.

Modo de consumo

  • En caso de tos severa, consume una cucharada cada 2 o 3 horas.
  • Como preventivo, toma una cucharada de remedio en ayunas todos los días.
  • Opcionalmente, puedes diluir el jarabe en un poco de agua tibia para facilitar su consumo.

Consúmelo continuamente siguiendo las recomendaciones dadas, para obtener buenos resultados.

Pero, si el síntoma persiste, o se agrava, es importante consultar al médico para analizar cuál puede ser su origen, y recetar el mejor tratamiento.