Se cree que los oídos se deben limpiar a menudo y lo más profundo posible. Pero resulta que no es así: puedes limpiar solo su parte externa y con un algodón húmedo. No se deben limpiar los oídos a niveles más profundos de lo que pueden alcanzar tus dedos.
Al final del artículo también encontrarás un truco genial con ajo.
Bono. Ayuda del ajo
El ajo tiene propiedades antimicrobianas debido a la alicina que contiene. Por esto fue ampliamente utilizado para tratar infecciones de oído, entre otros problemas. Solo coloca un pedacito de ajo en un hilo y sácalo cuando ya no se sienta cómodo.