El dolor del túnel carpiano puede llegar a causar incapacidad. Por fortuna, en la actualidad hay varias opciones terapéuticas que contribuyen a su alivio. Veamos en detalle algunos remedios
El síndrome del túnel carpiano (STC) es una condición que afecta a alrededor del 1 % de las personas en edad laboral. De hecho, es la causa más común de dolor en las manos en trabajadores manuales. Afortunadamente, en la actualidad hay varias opciones terapéuticas que ayudan a reducir este dolor. ¿Te interesa conocerlas? Descubre 7 remedios en el siguiente espacio.
¿Qué es el síndrome del túnel carpiano?
La revista médica American Family Physician define el síndrome del túnel carpiano como «la neuropatía por atrapamiento más común de la extremidad superior». De hecho, corresponde al 90% de todas las neuropatías. Es una condición que se genera cuando se da una compresión e irritación del nervio mediano dentro del túnel carpiano en la muñeca.
Síntomas del síndrome del túnel carpiano
Esta dolencia, considerada ocupacional, es más frecuente en las mujeres, sobre todo mayores de 40 años. Una buena técnica para determinar si la sufrimos es colocar el codo sobre una mesa o escritorio, con el brazo y la mano en línea recta. A continuación, flexionaremos la muñeca y la moveremos durante un minuto.
Si aparecen alguno de los siguientes síntomas, es preciso que consultes con un médico:
- Hormigueo en la muñeca o la mano.
- Dolor en la zona.
- Adormecimiento.
- Debilidad para sujetar objetos como un vaso.
- Rigidez de los dedos, especialmente pulgar, índice y medio.
- Sensación de calor en los dedos.
El diagnóstico médico es muy importante, pues el dolor puede tener diversos orígenes y niveles de severidad. De hecho, en ciertos casos es necesario hacer una intervención quirúrgica. Por tanto, aunque los siguientes remedios pueden ayudar al alivio del dolor, lo mejor es consultar.
Remedios para reducir el dolor del túnel carpiano
El dolor del túnel carpiano suele empezar lento y gradual. Asimismo, en un principio puede afectar una sola mano y, más tarde, extenderse a las dos. De acuerdo con un estudio publicado en Frontiers in Medicine el tratamiento no quirúrgico contra esta dolencia sigue siendo un tema de debate y los resultados son controversiales.
Pese a esto, en la mayoría de países suelen recomendarse antes de probar alternativas quirúrgicas. En general, los remedios para esta condición incluyen: férulas nocturnas, inyección de esteroides, antiinflamatorios no esteroideos, yoga, entre otras opciones terapéuticas.
Férulas nocturnas
El dolor del túnel carpiano puede causar interrupciones del sueño. Por ello, es conveniente optar por el uso de férulas nocturnas. Si bien no son dispositivos para curar este problema, sí son útiles para ayudar a controlar los síntomas, como lo detalla una publicación en Biblioteca Cochrane.
Para mayor comodidad, el paciente debe probar varios tamaños y tipos de férulas de las que venden en farmacias o tiendas especializadas. No hay descritos efectos adversos, pero su uso diario no está recomendado.
Inyección de esteroides
De acuerdo con información publicada en The American Journal of Surgery, las inyecciones de esteroides proporcionan un alivio temporal del dolor y los síntomas del síndrome del túnel carpiano en un 70 % de los casos, hasta un mes después de la inyección. Sin embargo, pasado este tiempo, los síntomas tienden a reaparecer.
Antiinflamatorios no esteroideos
En la mayoría de los casos, el tratamiento para calmar el dolor del túnel carpiano incluye antiinflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno. En general, contribuyen a reducir la inflamación y proporcionan un alivio temporal del dolor, como lo detallan en Canadian Family Physician.
Yoga
Si bien las evidencias aún son limitadas, la práctica del yoga se ha relacionado con beneficios para calmar el dolor causado por el síndrome del túnel carpiano. De hecho, en un estudio publicado en Journal of the American Medical Association, el yoga fue superior a otras opciones terapéuticas como las férulas.
Finalmente
Como mencionamos, hay muchas otras opciones terapéuticas que contribuyen a combatir esta dolencia. Sin embargo, la elección entre una y otra depende de las características de cada caso. Por tanto, es importante consultar al médico y seguir sus recomendaciones.