6 señales de un nivel alto de azúcar en la sangre

Cuando existe un nivel alto de azúcar en la sangre, el organismo lo manifiesta de una forma mucho más evidente de la que quizás pueda pensarse. Ahora bien, hay que tener en cuenta que, una vez se notan, es necesario realizar cierto seguimiento. En caso de que las señales persistan en el tiempo, será necesario acudir al médico.

Realizar el seguimiento puede resultar mucho más sencillo si se tiene una idea general de cuáles son las señales de alerta. Para ayudarte con ello, te revelaremos cuáles son.

Señales que indican un nivel alto de azúcar en la sangre

Por lo general, se tiende a asociar los niveles altos de azúcar en la sangre con problemas como la diabetes, pero lo cierto es que no es exclusivamente así. La alteración también puede ocurrir como consecuencia de:

  • El estrés.
  • Infecciones.
  • El sedentarismo.
  • Algunos medicamentos.
  • Una comida rica en carbohidratos (más de lo usual).
  • Cambios hormonales, como los que ocurren durante la menstruación.

1. Polifagia

La polifagia, mejor conocida como el aumento de apetito o simplemente ‘Hambre’, es una de las señales que pueden indicar un nivel alto de azúcar en la sangre. ¿Cómo se manifiesta? Como una sensación de hambre persistente, independientemente de cuánto se coma.

Cuando se tiene un nivel alto de azúcar en la sangre, esto prevendrá que la glucosa se libere en las células. Como resultado, el organismo no obtendrá la energía que necesita y se verá obligado a seguir pidiendo comida, lo que generará esa sensación de hambre constante.

2. Debilidad / Fatiga

Otra de las señales que pueden indicar un nivel alto de azúcar en la sangre es la sensación de fatiga constante o debilidad. La persona se siente cansada todo el tiempo, aún cuando no está realizando un esfuerzo o una rutina que resulte agotadora.

Al igual que en el caso de la polifagia, dado que el organismo no es capaz de conservar y absorber la glucosa adecuadamente, la energía no se aprovecha de forma eficiente; por ende, las células del organismo no reciben la cantidad de alimento que necesitan. En consecuencia, la persona se siente cansada, incluso ‘sin tener motivos’ para estarlo.

3. Poliuria

La micción frecuente es otra de las señales que indican un nivel alto de azúcar en la sangre y también vienen a ser uno de los síntomas de la diabetes. ¿Por qué ocurre? Porque los riñones intentan recuperar el equilibrio y desechar el exceso de glucosa, a su manera. 

En otras palabras, el organismo disuelve la sangre con el líquido intracelular. De esta forma, intenta que la concentración de azúcar en sangre vuelva a niveles más normales, lo que se traduce en tener ganas de ir al baño con mayor frecuencia de la normal.

4. Pérdida de peso en poco tiempo

Una de las señales que puede indicar un nivel alto de azúcar en la sangre es la pérdida drástica y repentina de peso. Esto será posible incluso si se realizan comidas copiosas y el valor calórico de los alimentos es alto. Las razones vienen a ser las siguientes:

Al perder una gran cantidad de líquidos por la micción frecuente, no se retendrá absolutamente apenas líquido y eso hará que pierdas peso. Una gran cantidad de orina con un nivel alto de glucosa hará que el organismo gaste más calorías.

Todo ello provocará que el organismo intente liberarse del exceso de glucosa que pueda presentar. Además, si el nivel de insulina es insuficiente para el metabolismo, el cuerpo se dedicará a quemar grasa.

5. Visión borrosa

Si de vez en cuando la visión se vuelve borrosa, esta también puede ser una señal de un nivel alto de azúcar en la sangre. En este caso, este problema estaría relacionado con las señales anteriores y, en especial, la deshidratación.

Cuando el organismo sufre una alteración, muchos órganos se ven afectados, incluyendo los ojos. En casos graves, estos pueden deformarse y perder la habilidad de enfocar correctamente.

6. Irritabilidad

Las personas con un alto nivel de azúcar en la sangre son más propensas a estresarse con facilidad y a no gestionar correctamente sus emociones debido, en gran parte, a la descompensación orgánica que presentan.

Dado que el cerebro necesita un suministro uniforme y adecuado de glucosa para su buen funcionamiento, si se producen cambios drásticos en dicho suministro, el estado anímico se verá afectado.

Además, el azúcar también está relacionada con la absorción de otro nutriente responsable por el estado anímico, el cromo, ya que los niveles de insulina no se mantienen sin él.

¿Qué puedes hacer?

Si has experimentado varios o todos los síntomas mencionados anteriormente, es recomendable que acudas a tu médico cuanto antes. Comunícale tus sospechas y no temas comentarle con detalle acerca de tu estilo de vida (dieta, hidratación, rutina de ejercicios, tipo de trabajo, etcétera). Mientras más datos le puedas proporcionar en la entrevista, mejor.

Evita tomar medidas sin haber consultado antes con el médico ya que, en lugar de obtener los beneficios que deseas, podrías conseguir precisamente lo opuesto.