5 hábitos que alteran tu tiroides

Para las personas con enfermedad de la tiroides, ya sea hipotiroidismo (tiroides poco activa) o hipertiroidismo (tiroides hiperactiva), enfermedad de Hashimoto o enfermedad de Graves u otras condiciones, hay algunas cosas importantes que debes saber acerca de los alimentos y bebidas, y saber como alteran la tiroides.

Qué es la tiroides

La glándula tiroides es una de las más grandes del sistema endocrino y se encuentra en el cuello, por debajo de un cartílago. Tiene la forma de una mariposa en las personas sanas, y se encuentra en contra de la tráquea y la laringe. La tiroides controla cómo responde el cuerpo a otras hormonas, como ciertas proteínas, y controla la rapidez con que el cuerpo utiliza la energía.

Factores que alteran tu tiroides

La tiroides influye en la temperatura del cuerpo, el estado de ánimo, y tu tasa metabólica. Produce triyodotironina (T3) y tiroxina (a veces llamado T4). También produce calcitronin, que tiene un papel en la homeostasis del calcio. En otras palabras, es muy importante que funciona correctamente.

1. El humo del cigarrillo

El humo del cigarrillo tiene varias toxinas como el tiocianato en particular, que son especialmente peligrosos para la tiroides, y puede desencadenar la enfermedad de tiroides en personas susceptibles.

Los fumadores de cigarrillos también son más propensos a desarrollar complicaciones oculares de la tiroides de la enfermedad de Graves, y los tratamientos para esos problemas oculares son menos eficaces en los fumadores. Así, además de todos los otros problemas de salud relacionados con el tabaquismo, puede agregar mayor riesgo y el empeoramiento de la enfermedad tiroidea.

2. La soja puede ser un problema

La soja actúa como un bociógeno, e inhibe la absorción de la hormona tiroidea. No debes consumir en exceso de soja, especialmente procesada, como batidos, polvos de soja leche, bares y suplementos. Es posible que desee eliminar la soja, o limitar el consumo de soja a formas fermentados, como el tempeh, en pequeñas cantidades como condimento, y no como un reemplazo de la proteína primaria.
Si usted es hipertiroidismo, es posible que desee hablar con un médico nutricional sobre la incorporación de más soja en su dieta.

3. Estrés y enfermedad

Tu sistema endocrino es sensible al estrés físico y emocional, y los períodos de estrés intenso, o el alivio de ese estrés, pueden tener un impacto en tus niveles de tiroides. En el caso de los pacientes con enfermedad de Graves si se suma una alimentación incadecuada, más los grados de estrés, tienen una repercusión mayor en su niveles de tiroides. Un efecto similar puede ocurrir con los pacientes de la enfermedad de Hashimoto, que ven también este aumento en sus valores normales.

4. Falta de yodo

En algunas zonas del mundo, la sal yodada es una forma esencial para prevenir las enfermedades por deficiencia de yodo, el cretinismo y el retraso debido a la deficiencia de yodo en las mujeres embarazadas puede ser uno de los causantes de los problemas de tiroides. En los EE.UU., sin embargo, muchas personas han limitado su consumo de sal, o han dejado de usar sal yodada.

Para que la tiroides funcione correctamente debes suministrarle al cuerpo yodo de manera saludable, para ello puedes acudir al uso de la sal marina para mejorar tu salud, además de ser la mejor opción para descartar la sal de mesa común.

5. El consumo de gluten o la enfermedad celíaca

Algunos pacientes con enfermedad de tiroides debido a la enfermedad celiaca o intolerancia al gluten y el trigo tienen problemas de enfermedades autoinmunes.

Para estos pacientes, adquirir una dieta libre de gluten puede eliminar los anticuerpos, y causar una remisión de su enfermedad tiroidea autoinmune. Incluso para algunos pacientes que no tienen la enfermedad celíaca, y llevan una dieta libre de gluten pueden también reducir los anticuerpos, reducir la hinchazón y ayudar con la energía y pérdida de peso.

Los alimentos bociógenos

Los bociógenos son sustancias de origen natural (en ciertos alimentos) que pueden causar problemas en la glándula tiroides, que se llama bocio.

Los alimentos bociógenos también pueden funcionar como un fármaco antitiroideo y frenar la tiroides y que sea de baja actividad (hipotiroidismo).

Los principales alimentos bociógenos son los vegetales crucíferos como el brócoli, la coliflor, la col rizada y la col, entre otros.

Los bociógenos en realidad no significa que sean malos para la salud, incluso en realidad pueden ser saludables para ayudar a combatir algunos tipos de cáncer, pero si se toman en grandes cantidades, en pacientes con una mala función de la tiroides, pueden llegar a agravar su condición.